Gabriel Cruz, de 74 años de edad, y Francisco Jiménez, de 67
años, hacen parte del grupo de 52 abuelitos que viven en el Hogar Santa
Librada, ubicado en Guaduas (Cundinamarca), y que ahora se han convertido en
una prioridad para la concesión Ruta del Sol 1, a cargo de la Agencia Nacional
de Infraestructura-ANI.
Desde que llegaron al centro la rutina de estos
abuelitos es sagrada. Todas las mañanas, después de ducharse y de probar un
buen desayuno, se integran a las labores de limpieza y siembra de los cultivos
que hay en el hogar.
“Ellos hacen limpieza, rosean las matas; nos
ayudan con los cultivos de maíz, tomate, cilantro, cilantrón y limonaria que
tenemos. También se encargan de sacar la yuca. Son muy colaboradores”, cuenta
Yury Paola Cruz Peñuela, encargada de la coordinación del hogar municipal.
Debido a las medidas establecidas para evitar
el contagio del Covid-19, estos abuelitos tuvieron que permanecer aislados
durante varios meses, sin embargo, esta situación no fue motivo para que sus
necesidades básicas fueran atendidas, pues recibieron apoyo del Gobierno
nacional, a través del Consorcio Vial Helios, encargado del corredor Ruta del
Sol 1.
Todos los proyectos concesionados, a cargo del
Gobierno nacional, tienen un componente social que busca beneficiar a los ciudadanos
que residen en las zonas donde se llevan a cabo las obras. Esto solo ratifica
el compromiso que se tienen con más regiones y su bienestar”, indica Ángela
María Orozco, Ministra de Transporte.
Precisamente, gracias a la gestión social de
los proyectos concesionados, se entregó al hogar un mercado de aproximadamente
tres millones de pesos, que complementó la alimentación de estos adultos
mayores, generando mayor bienestar.
“Estamos muy agradecidos por las ayudas
recibidas. Nos han colaborado mucho. Este mercado fue una ayuda muy grande para
nosotros durante la etapa más dura de la pandemia”, agrega Yury Paola, quien,
junto con 13 compañeros más, administra el hogar.
Adicionalmente, se realizaron labores de
mantenimiento, arreglo y embellecimiento de las zonas verdes de las
instalaciones.
“También nos han apoyado en jornadas de
limpieza, arreglo de goteras y en la instalación de mallas alrededor del hogar
para evitar el contagio del Covid, a través del contacto con población
externa”, sostiene la cuidadora.
Las labores también incluyeron la adecuación
del sendero a la entrada del centro, para facilitarles la movilidad a los
adultos mayores que están en silla de ruedas.
Finalmente, también fue entregada estantería
para el almacenamiento de alimentos, un equipo de cómputo para el área
administrativa y 25 bultos de cemento, ayudas que en total sumaron cinco
millones de pesos.
El Vicepresidente de Planeación, Riesgos y
Entorno, Diego Morales, explica que la labor realizada en el hogar Santa
Librada es un gran aporte para el desarrollo de las comunidades, que promueve
la inclusión social en las poblaciones del área de influencia de los proyectos.
“Nuestros abuelitos, adultos mayores en
condición de vulnerabilidad, también hacen parte del trabajo social que lleva
bienestar a las comunidades donde se desarrollan nuestros proyectos. Es por eso
que nos satisface que estas ayudas les llegue a esta población que tanto lo
necesita”, manifiestó Morales.
Conexión con el centro del país
El municipio de Guaduas, en Cundinamarca, es
una de las poblaciones que están dentro del área de influencia del corredor de
tercera generación, Ruta del Sol 1.
Con una longitud de 60 kilómetros en doble
calzada, entre Guaduas y El Korán, en Cundinamarca, este proyecto tuvo una
inversión de 700.000 millones de pesos, generando 3.200 empleos directos en su
fase de construcción y cerca de 10.000 indirectos.